claudio.madaires@gmail.com
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEizDzsy5mGhc23hmnONEN0iYWTXKlNG6PvF8E8MceYb4xECgZ1vXAc1QyL0Zdm4yvcD_thCpjAyzJ7o_0kPmRMSKC1zrk2AYrFzP1lWxfwmukbKgA9i2pZACszcf_6arnUqtzdYGysyAi4/s400/OmarKhayyam_Cuarteto24.jpg)
En el Observatorio de Bagdad,
Omar, tú encuentras sólo la Verdad
tras los Velos eternos de la Noche.
¿No serás acusado de impiedad?
Si hay verdades ocultas tras los cielos,
¿por qué razón fanáticos recelos
estorban a la Ciencia de los Astros?
¿No es Dios quien nos descubre aquellos Velos?
Sólo adoro a mi copa y a mi amada;
mi simple paraíso es la alborada
que Dios me ha permitido en su Clemencia.
¿Yo he violado su Ley idolatrada?
Yo nunca volvería si pudiese
hacer mi voluntad. No me ennoblece
esta vida de reo que me asfixia,
que me obliga a beber, que me enloquece.
© Claudio Madaires, de su libro Apócrifos de Khayyam
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj05PBRKJvHyg3fjtJniQ-EY7PgShlhmT8NU1o7pDZUXHS_OcDvVXOy_gtTic266D4Rhi7Nyjmfjjq4U4cQn514QgkD_Qi4ps5pTYl3_H-kTphIq1yDZ9d1prZHd96THb6w3PiwE2Ktd4A/s400/pro_tapalibro_ApocrifosDeKhayyam.png)